Metropolitano y Nacional, Apertura y Clausura, Inicial y Final, Copa de la Liga y Torneo de la Liga Profesional. Desde 1967 a esta parte, con algunos regresos esporádicos a los viejos campeonatos anuales, la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) ha partido en dos la cancha de Primera División.
Primero fue la decisión de abrir el juego al fútbol del interior, aunque sea por un ratito. Después, la conveniencia de adecuar la competencia al calendario de Europa, para que los clubes de nuestro país pudieran colocar a sus mejores valores en ese cotizado mercado. Más adelante, la necesidad de sumarle atractivo a los torneos y no perder público en los estadios.
Ahora se impone la urgencia de acomodar los tantos sobre la marcha, una costumbre en la era de Claudio ‘Chiqui’ Tapia, tras una nueva suspensión de los descensos. Esta medida elevará a 30 equipos la cantidad de participantes, sumando a los dos que subirán desde la Primera Nacional.
La partición también registra un antecedente lejano y excepcional en los albores del profesionalismo, con la Copa de Honor y la Copa Campeonato de 1936, y un duelo entre ambos ganadores bautizado como Copa de Oro.
A partir de 2025, y vaya uno a saber hasta cuándo, la llamada ‘Liga de los Campeones del Mundo’ se dividirá otra vez en Apertura y Clausura. El retoque fue aprobado en la asamblea ordinaria que la AFA realizó el pasado 17 de octubre en Ezeiza, la que extendió el mandato presidencial de Tapia hasta 2029 y fue objetada por la Inspección General de Justicia (IGJ).
Vidas paralelas
Aunque no trascendieron muchos detalles, ya circula entre los dirigentes de los clubes un dossier con el formal título ‘Plan de reestructuración de los campeonatos” y una pomposa declaración de objetivos: “potenciar de manera significativa los resultados y logros del fútbol argentino”.
El borrador enuncia como propósitos “generar mayor interés e interacción de los simpatizantes, hacer más atractivo el producto para la venta de los derechos de la TV, ofrecer previsibilidad en los calendarios y lograr una mayor federalización del certamen de elite, llevando el fútbol a lugares geográficos que hoy no pueden contar con equipos de Primera División”.
A diferencia de lo que sucedió entre 1991 y 2012, el primer Apertura que consagró a River Plate y el último Clausura que ganó Arsenal de Sarandí, los torneos coincidirán con el año calendario y los protagonistas no se medirán todos contra todos, invirtiendo la condición de local y visitante en cada semestre. Habrá dos zonas de 15 equipos, con una fase inicial en la que cada competidor disputará 15 partidos, incluidos un ‘clásico’ y un interzonal contra el elenco que coincida de ‘sombrero’ en la llave paralela.
El nuevo sistema de disputa, que repartirá la temporada en Apertura y Clausura, también significará, al menos de movida, un clásico menos para el fútbol cordobés.
Una vez completada esa instancia, se desarrollará la etapa definitoria, con los cruces de octavos de final, cuartos de final, semifinal y final, que se disputarán a partido único. Con excepción del encuentro que consagrará al campeón, que será en escenario neutral, todavía no hay precisión si las otras eliminatorias se dirimirán en reductos imparciales o con localías para los elencos que hayan clasificado en mejor ubicación en la primera etapa.
Además del Apertura y del Clausura, la temporada 2025 de la Liga Profesional de Fútbol contempla la disputa de otras tres competencias oficiales: Trofeo de Campeones (se dirime entre ambos ganadores), Supercopa Argentina (entre el vencedor del Trofeo de Campeones y el triunfador de la Copa Argentina) y Supercopa Internacional (la disputan el acreedor del Trofeo de Campeones y el primero de la tabla anual).
Dudas y certezas
Con la mentada reestructuración, habrá una disminución de casi un centenar de partidos por año. El actual esquema contempla 584, entre la Copa de la Liga (203), el Torneo de la Liga Profesional (378), el Trofeo de Campeones (1), la Supercopa Argentina (1) y la Supercopa Internacional (1). Con el nuevo sistema, entre Apertura y Clausura habrá 450 encuentros en las fases iniciales, mientras que las etapas finales podrían agregarse hasta 30 cotejos, según el formato que se disponga. Sumando los trofeos extras, la temporada 2025 tendría un máximo de 483 juegos.
La modificación también tendrá un impacto directo en el beneficio que reciben los abonados a los clubes, ya que cada equipo participante tendrá menos presentaciones en sus reductos. Más allá de que eventualmente sus buenas actuaciones les permitan agregar localías en instancias definitorias (aún no está resuelto y no asoma como la opción más factible, ya que la AFA pretende colocar partidos en plazas no habituales), los elencos pasarán de los actuales 20 ó 21 juegos a 15 compromisos como anfitrión. Considerando el almanaque, la cifra representa un partido cada 24 días.
La participación en las copas Libertadores o Sudamericana, más que nunca, asoma como un objetivo necesario para nuestros clubes.
En el caso de los cordobeses, también habría un clásico menos, ya que Instituto compartirá zona con Belgrano o Talleres, y su emparejamiento actual es un club de otra jurisdicción. Al respecto, aún no está resuelto si los grupos tendrán idéntica conformación en Apertura y Clausura, y también está la chance de que se cubra ese ‘bache’ haciendo que ‘la Gloria’ se enfrente al Pirata o al Albiazul en la jornada de los interzonales.
A diferencia de la actual temporada, en la que cada participante disputa un mínimo de 41 partidos entre Copa de la Liga y TLP, en la agenda del año que viene hay garantizados 30 encuentros por equipo entre Apertura y Clausura, con la chance de sumar ocho juegos más, en caso de avanzar hasta la final en ambos torneos. Además, los elencos de Primera División tendrán asegurados un duelo de Copa Argentina, y otras seis presentaciones si clasifican a una copa internacional. Sumando todos los compromisos oficiales (ver recuadro), podrían protagonizar un máximo de 55 partidos.
TEMPORADA 2024
- Talleres: 53 partidos (Copa de la Liga, 14; Torneo de la Liga Profesional, 27; Copa Argentina, 3; Copa Libertadores, 8; más el encuentro pendiente vs. River por la Supercopa Internacional). Completaría 24 presentaciones de local (20 de Liga Profesional y 4 de Libertadores), 25 de visitante y 4 en cancha neutral. Clásicos: 4 (dos ante Belgrano y dos frente a Instituto).
- Belgrano: 50 partidos (Copa de la Liga, 14; Torneo de la Liga Profesional, 27; Copa Argentina, 1; Copa Sudamericana, 8). Disputará 25 juegos de local (21 de Liga Profesional y 4 de Sudamericana), 20 de visitante y 1 en cancha neutral. Clásicos: 3 (dos ante Talleres y uno frente a Instituto).
- Instituto: 42 partidos (Copa de la Liga, 14; Torneo de la Liga Profesional, 27; Copa Argentina, 1). Jugará 20 de local (Liga Profesional), 21 de visita y 1 en campo neutral. Clásicos: 3 (dos con Talleres y uno con Belgrano).
TEMPORADA 2025
- Cada uno de los equipos cordobeses jugará 30 partidos de Liga Profesional (Apertura, 15; Clausura, 15; con la chance de sumar entre 1 y 8 cotejos de fase final, en sedes a definir).
- Quien clasifique a un certamen de la Conmebol, se asegurará un mínimo de 6 compromisos más (3 de local y 3 de visitante) y un máximo de 15 juegos (sumando un eventual repechaje y las fases finales).
- En Copa Argentina jugarían entre 1 y 6 partidos (todos en campo neutral) y además está la chance de acceder a las definiciones de los tres trofeos extras que otorgará la AFA, siempre en reducto imparcial.
- Clásicos: en principio, serían cuatro (dos Talleres-Belgrano y dos entre alguno de aquellos equipos con Instituto), uno menos que en 2024. Podrían sumarse otros enfrentamientos por interzonal o cruces de fases finales.