El ministro de Bioagroindustria de la provincia de Córdoba, en diálogo con Radio Continental, se refirió al debate sobre las retenciones al campo, gravamen que desde Nación se cobra por la exportación de productos agropecuarios. En la entrevista aseguró que el reclamo sobre las retenciones al campo de parte del actual gobernador no es “demagógico ni fuera de contexto”, debido a que desde la gestión se considera que “no es un problema solamente de la gente del campo”, sino que observándolo en perspectiva, 22 años de cobro sostenido también “perjudican al crecimiento de la provincia”.
El ministro de Llaryora indicó que “las retenciones están naturalizadas” y disparó contra la carga de impuestos: “El 94% de la presión impositiva es nacional”. Aunque la gestión actual ha salido claramente a pronunciarse contra las retenciones, algunos sectores le reclaman el aumento del inmobiliario rural cordobés.
En este sentido, Busso alegó que es el único impuesto que se cobra. “En la ley impositiva se ha derogado, por ejemplo, un impuesto muy cuestionado como es la ‘mera compra’. En Córdoba, tampoco hay tasa vial. Hay un solo impuesto que se cobra, que es patrimonial, el inmobiliario rural, y que tiene una particularidad, el 98 por ciento de lo que se recauda, o sea, todo lo que se recauda va a un fondo de desarrollo agropecuario que vuelve para tratar de sostener la infraestructura rural, la seguridad, riego y, a su vez, también financiar caminos rurales pavimentados”, arremetió.
En relación a la gestión de Milei, el ministro recordó que han acompañado el proyecto y le han dado herramientas para ordenar sus números y estabilizar la economía, “pero necesitamos al lado un proyecto productivo que avance fundamentalmente en ampliar la torta, en hacer crecer esta torta, y se hace estimulando e incentivando”.
“Las retenciones pegan muy fuerte en cualquier actividad. Todos los proyectos políticos plantearon sacar las retenciones; ahora, bueno, nadie quiere o le cuesta mucho al Estado nacional sacar este tipo de recursos, porque en definitiva son fáciles de cobrar. Llegó la hora de decir basta, de plantear seriamente, sin demagogia”, aseguró.