Marcela Tauro lo vivió en carne propia: uno de los momentos más tensos de su carrera no ocurrió al aire, sino en un pasillo vacío de Canal 9. Y aunque el episodio ocurrió en los 90, recién ahora salió a la luz completa la historia. La Tauro la contó con crudeza, en Intrusos. Una anécdota sobre un violento arranque de Mario Pergolini en la que Jorge Rial se convirtió en un inesperado «salvador».
Todo se disparó cuando Ángel de Brito, en una entrevista en Bondi, le recordó a Mario una vieja escena. El conductor no la negó: dijo que había querido ahorcar a Tauro. Al día siguiente, la panelista dio su versión: “Llegó a intentarlo. Yo trabajaba en Indiscreciones y no sé si llegué a dar una información, si la dije del todo o no…”.
“Él estaba participando de Almorzando con Mirtha Legrand en el estudio de Bernardo de Irigoyen y yo en los estudios de Gelly, a varias cuadras”, rememoró, y siguió: “Cuando terminó el programa, yo estaba bajando una escalera; no había nadie en ese pasillo, y me agarró”. En ese momento, apareció Rial en escena.
“El que me salvó fue Jorge Rial, que en ese momento venía de hacer una nota”, agregó Marcela a lo que Rodrigo Lussich quiso saber si el chimento que tanto había enfurecido a Mario, si le había sido infiel a su pareja con su hermana, era real. Tauro no confirmó ni negó: «Imaginate que yo no sé lo que hice ayer, no me voy a acordar de lo que hice hace 40 años”.
LA PALABRA DE MARCELA TAURO SOBRE SU VIEJA PELEA CON MARIO PERGOLINI
“Debo haber dicho algo que hizo que él viniera a buscarme, pero no era la manera”, señaló Marcela, y agregó que con el tiempo hicieron las paces con Pergolini: “Yo la verdad que soy de sanar las cosas. Me lo he encontrado varias veces y me ha saludado”.
Y la panelista lanzó una información inesperada que actualiza el viejo chimento que enloqueció al conductor: “Muy amablemente, me escribió por Instagram la cuñada de él. La mujer en cuestión. Me pidió que aclarara que ella no tenía nada que ver y que era errónea esa información”.
“Debo aclarar que fue muy amorosa. Yo le dije: ‘Disculpame, pero no sé de qué me estás hablando’. Me dijo que me seguiría toda la carrera. Y le respondí que en la medida en que yo lo pudiera decir, lo iba a hacer, que no tenía ningún problema”, cerró la Tauro.