Aunque muchos lo asocian con récords, lujos y trofeos, hay una faceta de Cristiano Ronaldo que escapa del brillo del fútbol y lo muestra tal como es: un hombre profundamente conectado con sus afectos. Y en ese círculo íntimo, las mascotas ocupan un lugar especial, tanto para él como para Georgina Rodríguez, su pareja.
Lejos de las cámaras y los flashes, el astro portugués construyó una familia donde los animales son parte activa de la rutina diaria. No se trata solo de un capricho pasajero, sino de un verdadero compromiso con el bienestar animal.
“Cristiano Ronaldo, más allá de ser una estrella del fútbol, es un amante de los animales que encontró en sus mascotas una fuente constante de alegría y compañía”, aseguran desde su entorno más cercano.
Entre los más conocidos se encuentra Bobby Moore, un labrador blanco que lleva su nombre en homenaje al mítico jugador inglés. A él se suma Marosca, una labradora golden que Georgina adoptó en 2015 y que, desde entonces, se convirtió en inseparable del clan.
QUIÉNES SON LAS MASCOTAS DE CRISTIANO RONALDO Y SU FAMILIA
Pero eso no es todo. También hay lugar para los más pequeños: Abelhinha, un Yorkshire Terrier juguetón, y un caniche blanco que llegó al hogar cuando Cristiano Junior era solo un niño. “Con su energía y carácter juguetón, es una fuente constante de alegría para todos”, explican sobre la miniatura que no suele aparecer tanto en las redes, pero siempre está presente.
Entre los más singulares aparece Antonina, una perrita de raza crestado chino que adoptaron en 2021. Su aspecto exótico -por la falta de pelo- la convirtió en una de las favoritas del público, que la celebra cada vez que aparece en alguna publicación.
Y como si fuera poco, Ronaldo también tiene un gato esfinge llamado Pepe, una de las razas más exclusivas del mundo, con apenas ocho ejemplares registrados. Se trata de un felino ideal para convivir con niños, ya que su ausencia de pelo reduce las alergias. “Según varios especialistas, esta raza es perfecta para una familia con niños”, sostienen los expertos.
Por fuera del ámbito doméstico, el delantero portugués también colabora activamente con organizaciones dedicadas al cuidado animal y participa en campañas que promueven la adopción responsable. Un gesto que deja en claro que su empatía no se limita a sus mascotas, sino que va mucho más allá.
En tiempos donde la exposición pública suele centrarse en lo superficial, Cristiano elige hablar desde el amor. Y lo hace a su manera: con gestos, con compromiso y rodeado de aquellos que no lo aplauden por sus goles, pero que lo acompañan incondicionalmente.